A veces me encuentro en los demás; otras, descubro mi "yo" a solas, y en muchas otras ocasiones me pierdo. En mi mente, me alejo de la realidad y se me olvida que las emociones afectan: permiten vivir apasionadamente la vida, pero también alejarse de la realidad cuando menos conviene. "¡Qué estúpido todo esto!" me digo a mí misma y, sin embargo, cuánto efecto tienen en la percepción de la realidad, la vida y su significado, de nosotros mismos; y cómo nos hace recobrar la conciencia sobre nuestra existencia para vivir la propia vida intensamente de nuevo con perspectivas diferentes, aprendidas del exceso de emociones, o de la carencia de ellas.

Comentarios

Entradas populares de este blog